Hay una serie americana, llamada Jag, Alerta Roja, que veo cuando me la encuentro zappeando en la tele. La serie trata de la vida de unos abogados del ejército americano. Es decir, una serie de abogados ambientada en el ejército. Hasta ahora había encontrado capítulos entretenidos y pocos arrebatos patrióticos.
El último capítulo que vi trataba de una denuncia que la Corte Penal de la Haya había puesto al Secretario de Defensa de EEUU por un ataque a un hospital de Iraq, donde se encontraban refugiados los malos malísimos y que acabó con la muerte de civiles (podían haberlo ambientado en un Hotel donde se alojaban los periodistas, por ejemplo). Acusan al Gobierno americano de ir contra la convención de Ginebra, crímenes , etc etc (todo de ficción).
Esta acusación fue el pretexto para pasarse una hora justificando el ataque a Iraq, a hablar de la presunta presencia de armas de destrucción masiva y a la lucha contra el terrorismo (sí, el que debe venir de Iraq). Y, como no, lo más lamentable, recurrieron a la I y II guerras mundiales, donde los americanos vinieron prestos a la defensa de la democracia y la libertad a Europa. Argumentaban que preferían hacer ataques preventivos que llegar demasiado tarde, como pasó en la primera mitad de siglo.
Este valiente ejercicio de manipulación estaba falto de contrapunto, de un Pepito Grillo, de un sentimiento auto-crítico. Nadie les recordó a los americanos que, cuando Hitler invadió Polonia, los americanos nada hicieron, y sólo movieron el culillo cuando les atacaron Pearl Harbor. Que gracias a su invasión de Europa pudieron convertirse en el imperio que ahora son. En ese capítulo tan patriótico nadie les recordó que en Darfur están muriendo miles de persona y no se mueve un maldito dedo, que África se muere de hambre y que las guerras asolan todo su territorio consumiendo munición Made in Usa. Nadie les recordó lo que tardaron en actuar en Serbia-Croacia-Bosnia. Nadie les dice que la libertad en China les importa una mierda. Siguen recurriendo de una manera ruin a las guerras mundiales como pretexto de la necesidad que les tengamos como policías del universo.
Y eso es lo que ve un americanito medio. Esos que se ponen en pie antes de cada partido de basket para cantar su himno, esos que ponen banderas en las puertas de sus casas y hacen jurar a sus hijos fidelidad a ese trozo de trapo.
Bueno, aquí no andamos mucho mejor... aquí quemar ese trozo de trapo es delito.
El poder de manipulación de los medios de comunicación. Ya lo decína Rage Against the Machine en su canción Bullet in your Head
Just victims of the in-house drive-by
They say jump, you say how high
ellos dicen "Salta" y tu dices "Cúanto"
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